El 4 de julio de 2012 se ha presentado a los medios de comunicación la restauración de los dos retablos del crucero. Tras algo más de un año de trabajo, este tesoro heredado de nuestros antepasados, ha vuelto a tener todo su esplendor. El taller de José Carlos Rubio y el proyecto e investigación de Paloma López-Sidro, nos han devuelto la belleza original de estas joyas barrocas y seguridad, al anclarlos bien al muro.
Las imágenes de San Judas Tadeo, San Isidro, los santos dominicos Vicente Ferrer, Catalina de Siena y Rosa de Lima, han recuperado dedos, luz y los atributos que los hacen reconocibles. Son todas magníficas tallas del siglo XVIII. Ahora, junto a cada retablo podremos contemplar un panel explicativo con el proceso de restauración.
Agradecemos a todos los feligreses que colaboran con sus donativos a mantener el patrimonio recibido.
Mi gratitud al Párroco, Don Jesús-Joaquín, por la gran labor que viene realizando en pro de la conservación y restauración de las hermosísimas joyas barrocas que se contemplan y veneran en el Templo "del mejor de los montillanos". Enhorabuena.
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